¿El fin del macho alfa? I don´t think so

13 Nov

Rodrigo Guendelman, periodista y conductor de Radio Zero,  escribió en Tendencias la columna El fin del macho alpha (o la revancha de los pernos)  (ver) y me quedó dando vueltas. Tanto como para escribir esto. Y tengo suficiente autoridad en el tema como para opinar, es más: experiencia empírica, yo misma fui Penny durante un verano. Y por la pega me tocó conocer a una serie de proyectos de Leonard. Tristes proyectos de Leonard Hofstadter.

Efectivamente y como bien señala Rodrigo, los techis geeks de hoy y pernos abandonados a su suerte en el Colegio de ayer; ahora destacan en sus áreas de trabajo. Pero ojo que Chile no está ni cerca de ser Silicon Valley y estos tipos están a años luz  de ser físicos superdotados trabajando en algo que realmente importa. La mayoría reseña la última joyita tecnológica o prueba el juego que todos quieren tener, meses antes de que salga al mercado. ¿Buscando la cura para el cáncer? Mmm, no realmente.

Lo que no calculó el columnista de La Tercera fue que estos Leonards chilensis son tremendamente ególatras. Buscan aceptación y reconocimiento por todas las vías que le sean posibles: seguidores en twitter, fanaticos de sus programas -cuando los tienen- o de sus escritos cuando trabajan en medios; la admiración de sus alumnos cuando hacen clases y así sucesivamente.

Este grupete tiene una cierta fama -bien discreta, pero consistente-: un grupo compacto los sigue y le será fiel por siempre. Probablemente el grueso de la gente no los conozca, pero varios al otro lado del teclado sí y eso parece serles suficiente.

Pueden ser en una mirada rápida los machos Alpha de estos nuevos tiempos: y ser resilientes, buenos proveedores, cultos y  ubicados en la cima de su pirámide. Pero ojo que la verdadera Penny pateó a Leonard, al menos en la temporada que están transmitiendo en Chile; el final lo intuimos todos, pero bueno es una serie y además Penny no digamos que es muy brillante. Y lo pateó porque Leonard se convirtió en una bolsa de inseguridades. Necesitado de refuerzo y aprobación constante. Cualquier mujer de estos tiempos, sobre todo una Hembra Alpha hecha y derecha, se dará cuenta de que su Leonard es un Narciso. Y probablemente no lo aguante más que un verano. Si es una Penny un poco tontina, quizás un rato más. Pero ojo, que hasta la Penny de la serie sabía que Narciso era guapo. ¿Los Leonards chilenos? Mmmm, nuevamente: I don´t think so.

Sólo chicos

8 Nov

Por Rama Kaur

Este fin de semana extra largo me dieron ganas de tener sólo amigos hombres. Si me hubiesen dado luca por cada fémina que me llamó , tuiteó, escribió o se juntó conmigo para contarme de sus dramas sentimentales –o bien de la ausencia de éstos- me habría alcanzado para carretear los cuatro días.  ¿Desde cuándo las historias con los hombres se volvieron LO más importante en nuestras vidas? ¿Por qué tengo amigas con un pánico tan grande a estar solas, tanto, que aceptan tipos que no valen nada a su lado o que no las valoran a ellas?

Me pasó con mi amiga Paula, por ejemplo, que llevaba años intentando entrar a un organismo estatal de investigación y finalmente lo logró. Cuando nos juntamos para que me contara cómo era el trabajo y felicitarla por haber conseguido su sueño anhelado por tanto tiempo me dijo: “Si, si, pero lo que realmente tengo que contarte es que conocí a un mino…” Si fuera que conoció al hombre de su vida, demás que su pega importaría un pucho, pero el sujeto en cuestión –ella lo sabe mejor que yo- es  sólo uno más.

De todas mis amigas mujeres pololeando pienso en dos que son realmente felices. Que tienen relaciones que las hacen brillar y que crecer junto a sus parejas. De ellas escucho menos, claro, porque están viviendo sus romances a concho y a la distancia las bendigo y espero que un día la dicha que viven me llegue a mí. El resto pela al pololo como una descuera a un compañero de pega pesado y desleal. Bueno, si el pololo es tan como las tristes ¿para que diablos siguen perdiendo el tiempo con él? Luego otras son claramente infelices y posponen sueños o traspasan sus propios límites aceptando traiciones que nunca habrían pensado dejar pasar, por no terminar. ¿Valdrá la pena?

En los pasados meses me he encontrado con amigas infieles, amigas gorreadas, amigas en relaciones estancadas y aburridas y todas siguen en la misma. Otra conocida a estas alturas, ya no puedo llamarla amiga, después de que la dejara el pololo y llorar como magdalena, se comprometió con el primero que le habló bonito porque, en sus palabras: “es polola”. No puede estar sin pololear.

¿Tan difícil les resulta estar solas? ¿No se soportan a sí mismas? ¿Es tener un pololo un logro mayor a conseguir la pega soñada o partir a un posgrado en el extranjero? Quizás lo es y yo soy la que está mal planteada. No sé. Mauro, mi nuevo compañero de trabajo me dice que es la generación la que está mala: que no le damos el valor real a las relaciones y por eso hay tanto engaño y tanta mentira.

Los hombres en cambio, son totalmente distintos: los que están pololeando y están bien, cuando les pregunto por sus pololeos me dicen que están la raja y seguimos hablando de lo que fuera que estábamos hablando. Si la polola es bacán te dicen que es por esto y por esto y si es bruja lo es por tal y tal motivo y fin del cotilleo. No alcanza para pelambre. Si ya no son felices (en su mayoría) terminan y nunca he escuchado a un macho dándole vueltas a la posibilidad de quedarse solo como si estuviera hablando de un cáncer terminal.

Estoy cansada de estas conversaciones, que de tan triviales se están haciendo normales y no me parece que lo sean para nada. De disfrazar verdades, de mentir sobre embarazos, de ser la amante de y ni siquiera cuestionarse. Honestamente, las minas son (omos) un  puro enredo: yo, prefiero ser amiga sólo de hombres.

Por fin es hoy!

28 Jul

Por Azahar

Qué terrible vivir pensando en lo que viene y no en el presente. Vivir queriendo que pase rápido el tiempo, despertar pensando en que se acabe pronto el día, empezar la semana queriendo que llegue luego el fin de semana. Ni hablar de los feriados, el fin de año o las vacaciones… ojalá fueran mañana! Y sean eternos. Es como querer que los días se pasen volando para que lleguen luego esos momentos tan anhelados, pero que pasen como en cámara lenta, que no se acaben nunca.

Lo peor es que son sólo percepciones, porque el tiempo pasa todo el rato igual, al mismo ritmo, tic, tac… no se acelera ni detiene. Lo que hace la diferencia, creo yo, es qué hacemos con el tiempo. Si todos los días hacemos lo mismo, seguro se nos va lento, si variamos haciendo muchas cosas, seguro se nos va sin darnos ni cuenta.

Encuentro muy agobiante la sensación -muchas veces colectiva- de no querer estar en el hoy sino en la noche, mañana o el próximo año. Vivir eternamente en función de un más adelante que se va igual que el hoy por mucho apego que le tengamos… por mucho que queramos que no se nos vaya, frustra y a veces angustia. Pero se va sin poder evitarlo y sagradamente se cumplen días y años y así como pasa, también se nos acaba.

Por eso la cárcel es tan buen castigo: te quitan tu libertad para hacer con el tiempo lo que quieras. Por eso el anhelo de la fuente de la juventud o de las vidas y el karma. Tener la ilusión de seguir viviendo, en el fondo es guardar la secreta esperanza de que más adelante se pueda hacer lo que hoy no, de que no importa tanto lo que pase, total, en la próxima vida lo logro.

No creo en otras vidas. Creo que ésta es la única que tendré y he tenido. Y por eso trato de ser consciente de cada día y de visualizar cómo pasa el tiempo o más bien cómo paso yo el tiempo, qué notas forman la banda sonora de mi día a día y qué materialidad darle a las horas, días y años.

Suena muy cliché el vivir cada momento a concho, el presente, el día a día. Pero es cliché justamente por su sabiduría. Y bien exigente es tratar de ser una gozadora toda la vida o una especie altruista del tiempo, pero sí sabiendo -sin angustia y presión- que cada día es necesario para que lleguen el fin de semana y las próximas vacaciones.

Un rayo de luz

20 Jul

por Azahar

Me aburro profundamente. Ya no me puede importar menos todo. No me mueve ni un solo pelo la contingencia nacional, menos el cambio de gabinete e incluso que Longueira sea el nuevo ministro de Economía, aunque igual estoy haciendo una mueca ahora, es inevitable. El destino de la selección y su derrota, francamente me dan igual, algo que antes jamás habría pasado por mi cabeza (soy viuda de Bielsa y decidí no sufrir más). Los colegas que opinan por twitter que esto o aquello debió ser lo mejor sobre el trending topic del día no me provocan en lo más mínimo. No hay reacción ni emoción.

El trabajo lo hago por osmosis y lo que es sorprendente –subo las cejas cuando escribo- es que lo sigo haciendo muy bien. Mis abuelos allá arriba estarán cansados y apunto de tirar la esponja de tanto cuidarme y mandarme buenas vibras… porque no se explica de otra forma mi buen desempeño con tan bajo nivel motivacional.

Es que mi umbral de energía está bajísimo y no me cabe duda que es por agotamiento. 5 años haciendo lo mismo, en el mismo lugar –pero con gente distinta, eso sí que sí- aburren a cualquier mortal, creo yo. El tema es qué hacer de ahora en adelante. Tal vez seguir la teoría de mi amiga Coni y da lo mismo qué, pero hacer, sólo por generar movimiento y así salir de este estancamiento que me tiene entre un café y el lavado de dientes, es decir, en la indecisión misma e insignificante.

Me aburro… (Léase como Homero lo diría, por favor). Café en mano ahora pienso que puede ser una actitud invernal, de hibernar, de querer dormir calentita hasta que llegue la primavera, pero qué depre, por dios! No creo que esto tenga una buena salida… es más, lo único medianamente atractivo que hoy visualizo es una torre de chocolate viniendo hacia mí que no me dejará, por segundo año consecutivo, usar bikini este verano, así que habrá que buscar el destino más austral posible, para evitarlo a toda costa!

Y no es descabellado, pero algo hay que hacer –además de ir al sur de nuevo de vacaciones o tal vez a vivir para siempre-. Pienso en el futuro, en buscar el famoso destino que te haga feliz pero que además sea rentable… también pienso en las palabras de mi sabio compañero: desapego, vivir con lo mínimo, quedarse con lo esencial. Renunciar a lo que está demás en esta vida y que son las cosas que creemos que nos dan felicidad, pero que no son más que artilugios aspiracionales que demuestran solamente nuestro poder de endeudamiento, nada más. Y hay que aprender a soltar, pero también buscar y encontrar aquello que nos haga felices en el hacer y además nos dé lucas para vivir… y es tan difícil incluso escribirlo… porque es como encontrar la fuente de la juventud o la flor de los siete colores, algo inmensamente difícil para algunos y más aún para los indecisos como yo, los confundidos vocacionalmente e inseguros esencialmente.

Por mucho que lo piense y hoy lo ponga por escrito, sólo me quedo con las dudas y preguntas de siempre, que se suman al letargo del día a día laboral y que la máquina rapidito se encarga de perturbar al primer llamado telefónico o interrupción, por más mínima que sea, haciendo que olvide toda idea y pierda la preciada inspiración.

Hoy al menos, alcancé a escribirlo.

Del Mori al encuentro con mi abuela, sin escalas

30 May

La noche de Santiago tiene ese... no sé qué...

By Dolce Far Niente

La idea era fácil, una invitación a un bar de moda del actor de moda, a tomarnos el trago de moda (o cualquier cosa, en fin). Tras un sábado gris en donde la compra de dos vestidos intentó arreglarlo, la propuesta de una amiga a tomar algo era como la luz en el túnel, porque siendo sinceros, no hay nada más aburrido que ser soltero y estar solo en un dpto un sábado a la noche.

Entonces me vi corriendo con las botas de casi siempre, con mi vestido nuevo y mi saco amigo, con nada de maquillaje en la cara pero intentando superarlo con algunas pinturitas metidas en la cartera…total, a quién le tenía que mostrar algo? Y ahí fue cuando me di cuenta que había perdido el norte.

La noche de sábado ya no me estaba esperando, mucho menos a una treintona con aires de adaptable a todo y superada. Más aún cuando te ponés a hablar del precio del cobre en medio de una fiesta en donde el 80% está apostando con qué aparato terminaría la poca noche que quedaba.

Tal vez cambiar el mojito por la sprite zero no fue una buena idea. Mucho menos, cuando en plena sesión de electro dance inentendible prenden las luces para que nos miremos a las caras y digamos: “Uff, quiero salir del tren fantasma!”, mientras que mis pies intentan seguir el ritmo que ni atinan. “Che, yo me voy en breve”, le dije a mi secuaz, mientras sostenía mi saco de siempre junto a mi cartera de siempre (por dentro el fantasma del humo recordaba la tintorería).

“Claro, acompañamos a la Sole y nos vamos”, la respuesta me relajó a la vez que me pegó en el medio del estómago: me estaba escapando antes de las 3 am a mi guarida calentita y segura en donde no tenía que demostrar a nadie nada: viejazo! Y sí, me llegó terriblemente. Basta de humo, hola a la lechuga y las boludeces a las que cuando era adolescente tildaba de “loca histérica” de la tía solterona.

En fin, el boliche de moda se deshizo ante el llamado de mi abuela a disfrutar de la burguesa seguridad. Y así fue…mientras me abrazaba sonriente a mi guaterito de temporada.

Mis tweets favoritos

28 Mar

 

por Rama Kaur

@rociomusica

«sometimes, to lose balance for love its part of living balancing life» (Cita a Elizabeth Gilbert)

@osses

“No cachaba que @SoledadOnetto también es italiana!. Si tuviera descendencia con Carcuro, los chiquillos saldrían con el pelo…ejem…verde?”

@gentz

“Hola! Tengo que decir que los músicos son mejores amantes que los gamers y los computines. Gracias”

@adanowsky

“Rompiste mi corazón, y sin embargo, sigo amándote con cada uno de sus pedazos”

@sesienterubio

“Las cenas agradables que deben pasar Andres y Marcela con Tiago e Ignacia. Todos pintan pa buenos pa la talla”

@anónimo

“Toda relación que empieza por una red social, termina en un unfollow”

@Lecarini

“Los señores del tiempo son como mis ex: Siempre le creí, pero siempre me fallaron”

@infante

“¿Sabe qué? Aunque ud mande correos que sólo dicen FYI se le nota que es piojo resucitao igual no más”

@sebastianpirana

“Para tranquilidad de la ciudadanía, @marcesabat descartó tsunami en Santiago” (11/03/2010)

@elquenoaporta

SHOA y la concha de tsu nami. (03/03/2010)

@VillalobosJara

‘Los hombres inventaron el cine para no olvidar el rostro de las mujeres que amaron’. (Cita a JL Godard)

@karlarubilar

«Soy diputada RN, soy mujer, soy médico, y yo receto la #pildora del día después»

@malepichot

“Me da ternura cuando un hombre después de muchos años con una genia se va con una trola boludita. Ay cuchi! te cansaste de pensar…ta bien”

@AlexdelaIglesia

«En los tiempos que corren, lo más punk es ser amable»

@malepichot

«Eternos agradecimientos a él que a la postre me reformó para que fuera feliz con otro»

 

 

 

 

 


Feliz navidad!!!

23 Dic

De parte de las materas, queremos desearles a tod@s una feliz navidad y un excelente año 2011, lleno de éxitos y alegrías 🙂

Acá los dejamos con una canción de esta calurosa navidad!

 

Las niñas quieren verse bien, Pedro Piedra

15 Dic

Ay hormonas!

3 Dic

Una vez al mes nosotras las mujeres tenemos que soportar una serie de cambios que, aunque son pasajeros, nos afectan de diversas formas en nuestro carácter, principalmente. Me refiero a cuando andamos en “esos días” y nuestras hormonas se revolucionan sin avisarnos. A algunas mujeres los cambios las ponen mal, tanto física como psicológicamente, en diversas intensidades.

Mi caso es el siguiente: durante esos días soy la persona más antipática, pesada e insoportable que puedan toparse, me transformo y lo peor es que todo el peso de ello se lo lleva mi pobre pololo, ya que en ese periodo lo trato pésimo, soy fría, cortante y por supuesto él me pregunta “por qué estás así tan pesadita?” y mi respuesta es “no sé”, NO SÉ! Esa respuesta debe ser la peor patada en el estómago para un hombre, con razón dicen ellos no entender a nuestro género.

Es fuerte cómo cambia la personalidad por un par de días, después de eso vuelvo a la normalidad, que por cierto es de pura simpatía y buena onda perdonando la autorreferencia.

Y qué decir de andar sensible, veo un perrito en la calle y me empieza a tiritar la pera, en la TV cualquier programa o película que tenga leves índices de drama me hacen llorar. Es increíble cómo la sensibilidad queda a flor de piel y lo peor de todo es no poder controlarlo.

Mi pololo ya sabe que la mayoría de mis cambios de ánimo son por culpa de “esos días” le admiro por tener que soportar tanta pesadez durante el tiempo que llevamos juntos, esa si que es prueba de amor.

Por La Mujer Zen

Un momento de lucidez

2 Dic

Con las chicas hemos hablado sobre la opción de darse un tiempo de celibato después de terminar una relación importante y después del libro de la Gilbert y la película de Julia, volvió a salir el tema a colación. Como algo puedo aportar al asunto, les cuento un poco de mi experiencia. Terminé una relación estando en otro país y quedé súper herida. Sumándole al engaño de mi pololo me encontré con que todo mi entorno de amistades (que para entonces era bastante grande) valoraba las relaciones de manera muy distinta a mí: la fidelidad no contaba para nada y estar con alguien era algo tan flexible, que estar emparejado no tenía mucho sentido. Mi desilusión fue tan grande que en un momento de lucidez –o de locura, lo que sea- decidí que no quería estar con un hombre nunca más…o al menos por un tiempo largo. Y así fue.
Estar totalmente soltera y célibe no es tarea fácil, al menos al principio. Yo tenía a mi favor que estaba chata y desinteresada en el sexo. Pero soy una persona apasionada y mis hormonas seguían funcionando, sin embargo, jamás trepé por las paredes ni nada por el estilo. Dentro de los puntos negativos del celibato está el más obvio: no tener sexo y no necesito explicarles todo lo que se pierde. Otra desventaja es que no es para nada saludable: en cada control con mi ginecólogo me llevaba una buena retada. Pero tenía grandes aspectos positivos: cantidades de energía nunca antes vistas, una enorme capacidad de enfoque y producía como nunca. Presenté una tesis excelente, trabajé como la mejor y escribí por montones. Al abandonar mi soltería- fanática recuperé las maravillas que me estaba perdiendo, pero efectivamente perdí mi capacidad de concentración y creo que castigaré al mundo sin el nuevo Rayuela de la literatura latinoamericana =)
Debo confesar, eso sí, que al igual que en el libro, practiqué yoga durante mi período sin sexo: este te ayuda a canalizar esa energía, sublimarla o bien utilizarla en lo que tú quieras. Al final, lo importante es que ese tiempo estuve 100% centrada en mí y logré entender quién soy yo, pensando solamente en mí. Es decir, yo sin estar pensando en alguien más. Y también, desde ese estado, descubrir cómo es la persona con la que quiero estar y lo que soy capaz de dar y aceptar. Cuánto puedo ceder y aceptar en una relación y cuánto quiero que me entreguen. Ese fue el gran descubrimiento.
En Kundalini Yoga dicen que cuando uno tiene relaciones sexuales se queda con el aura del hombre impresa en la suya y en cierto sentido esa era la sensación que tenía cuando me apesté tanto. No estaba sola, el recuerdo de esa desilusión e incluso el recuerdo de mi primer amor seguían conmigo y antes de empezar una nueva relación tenía que limpiarlos. Ojo que esta no es una oda a la soltería ni mucho menos al celibato, sólo pienso que es bueno considerar que si vas a dejar que se metan en tu aura mejor que ese personaje valga realmente la pena!